martes, 30 de abril de 2013

QUINT@ METE LA QUINTA

Adjuntamos el escrito enviado por el quinto Xabi Erdozain

QUINT@ METE LA QUINTA


Estimado quint@:
Quizás al leer el título del relato te preguntes el porqué de éste. No hace falta que te devanes los sesos ya que te lo explicaré a continuación. Ya tenía el relato prácticamente elaborado y me faltaba ponerle el título. Una noche andaba dándole vueltas a la cabeza pues este no, esto otro tampoco, finalmente ninguno me convencía y lo dejé, a los pocos días recuerdo que ya de noche sentía que tenía que descargar adrenalina, me puse el MP3 a tope y escuchando  “HiGHWAY  TO   HELL” de ACDC, me imaginaba que subía una montaña a toda hostia y entonces me vino el flash. Quint@, mente la quinta, justo esto es lo que me pedía, venía como anillo al dedo, y siguiendo con esto del rock, recuerdo que teniendo 17 o 18 años tuve por primera vez noticia de que existía un grupo de rock llamado UFO, que por aquel entonces ya era un grupo muy consolidado, con una larga trayectoria, cosas de la vida, hace poco asistí a un concierto magistral de ellos.  Siguen en todo lo alto, incombustibles haciendo verdad eso de que los viejos rocqueros nunca moriremos.
Sea para ti o no quint@ el rock un medio para conectar con tus emociones, lo que si tienes en común con un auténtico roquero es que tu espíritu nunca muere y tienes que dar mucha caña No me extrañaría que tu, al igual que yo , nacidos en el 63, últimamente te llegues a cuestionar que ya no soy el de antes, me voy haciendo mayor, tengo menos pelo , mas barriga, me tomo dos cubatas y paso tres días jodido, la celulitis me acosa,  el otro día una niña me dijo: ¿Señora me puede decir la hora? (uh, que mayor soy), en las vaquillas de fiestas has pasado de corredor a espectador, tengo que cuidar el colesterol , ya no me alcanza a leer sin gafas.
¡A QUE JODE¡  pero es así reconócelo, estás en claro declive, pero si ahora te digo quint@ ; imagínate por un momento con lo que sé ahora, si tuviese 20 años, para rato  me hubiera quedado sin entrarle a aquella tía que tanto me ponía, con lo que se ahora, para rato me la hubiera pegado a mí nadie, ahora se iban a enterar. Cuántas veces dije si, queriendo decir no.
Si a esto le añadimos de música de fondo el estribillo de las chicas de la bota (porque somos las chicas de la bota….) .Eh  quinto!, como te has venido arriba, yo creo que es normal, todos tenemos fluctuaciones, subidas y bajadas; pero si buscamos el promedio y el equilibrio habría que convenir que estamos en la edad ideal y en la cresta de la ola.
Vale que sí, que me puedes decir que en un partido de futbito ya no te siguen las piernas como antes, que empieza la pre menopausia, y  ¡que!,excusas que no valen nada no te engañes a ti mismo, el declive físico es inexorable , pero la autentica fuerza tuya reside en tu espíritu y éste nunca se marchita , yo creo que no estás viejo ni cansado a consecuencia de tu edad si no por el  lastre que traes de tu pasado, ahora que caen los 50 tacos puede ser un buen momento para hacer un alto en el camino, descasar un poco, hidratarse , reflexionar y arrojar de tu mochila todo lo que no te aporta nada y te hace sufrir. Para una vez hayas recuperado tu energía recuperar tu marcha y enfrentarte al gran reto que tienes ante ti.
“50 años no son nada”,    ”Bueno, son bastantes”
Las dos afirmaciones son ciertas y además son compatibles.
Respecto a la primera tienes 50 años, lo mejor está  por venir.
Respecto a la segunda, el tener esa edad algo de experiencia, ya te habrá dado, algo ya habrás conocido, aunque solo sea para darte cuenta de lo desastre que eres,  que ya es mucho.
Tú así como yo quint@ de Lizarra, tienes que reconocer que te has desarrollado como persona en un marco incomparable tanto en lo geográfico, paisajístico y humano,  como es  Tierra Estella, que guarda siglos de esplendor, cultura, tradiciones, sus gentes, las gentes que pasan por ella, maravillas de la naturaleza como Lokiz, Urbasa, Andía, Urederra, unas fiestas sin igual y así un largo etc. Yo que llevo más de 20 años en Iruña he observado que nosotros los quintos de Estella en ningún modo desmerecemos a los de Iruña. Es más, yo diría que en algunos aspectos es posible que hasta les superemos, aunque parezca mentira, hemos sido más vitalistas, participativos y transgresores que ellos, aquí había una atmosfera muy especial No podemos defraudar, intentaremos que esa atmosfera perdure.
Volviendo a lo de quitar lastre de la mochila, empezaría por decirte que no merece la pena torturarse por nada de lo que hayas hecho, de eso, no hay que arrepentirse, igual en todo caso, de lo que no hiciste, pero tampoco, la vida te volverá a ofrecer otra oportunidad.
Sientes dudas, miedo, caminas con inseguridad, no terminas de estar satisfecho, te dejas llevar con desidia y apatía, pedirías que se pare el mundo que tú te bajas, si consiguiese eso que busco seria más feliz, merezco correr mejor suerte, no me comprenden, porque me tiene que suceder eso a mí , da asco esta sociedad, necesitaré un lifting, ojalá me toque la lotería , no aguanto a mi suegra, tu lista de reproches parece no terminar nunca, persigues quimeras, depositas tu valor en cosas materiales y exteriores y te quejas  de que la vida no te da lo que te mereces, o que en cierto modo te ha abandonado. Eres tú el que has perdido la fe en ti mismo, todo tu potencial está en ti, pero has dejado de usarlo, y ahora estas perdido y no tienes ni remota idea de cómo ponerlo en marcha. Creo que deberíamos desandar el camino y retrotraernos a la infancia, a la inocencia de la infancia, que es donde reside nuestra sabiduría y podemos encontrar luz. Siente que eres un niñ@, de cinco a diez años, elige estar con la edad que quieras. Es tu espacio y nadie te lo pude arrebatar. Si eres honesto y observas cuáles son tus inquietudes y necesidades comprenderás que son las mismas que puedo sentir yo, que pude sentir cualquiera. Tú niño eres libre, necesitar jugar relacionarte, comunicarte, compartir con otros, necesitas recibir afecto comprensión, apoyo, tolerancia, tus inquietudes son compartir  disfrutar, en tus actos te entregas a tope sin más sin ninguna finalidad concreta, no te empuja el deseo de dominar al otro ni de poseer más que el otro, no es tampoco por vanidad, ni por hacer daño. Quien no ha logrado sentirse con un puñado de “txibas” el ser mas dichoso del mundo, o jugando una partida al hinque, o tu niña jugando durante horas seguidas a la goma que llegabas a sentir como si levitases, Pues bien que los sepas ese niño , sigue ahí, que sorpresa y tú  sin enterarte, estabas a otra movida, estabas sordo. El no ha dejado en ningún momento de aporrearte los oídos y pedir que le escuchases, pero tú arrogante mayor para qué necesitabas escuchar a un niño, anda no me molestes que estoy muy ocupado. ¿Muy ocupado en qué? en querer acumular, en desear destacar, en manipular, en discordias, en rencores, en discriminar, en fin en temas muy transcendentes y mientras tanto se te está secando el corazón. Cómete tu orgullo y tu soberbia y reconoce que tu niño te ha dado un  sopapo en los morros, por engreído. Valores humanos, cada vez menos. Empieza ya a quitarte medallas. Yo estoy contra las injusticias, contra la guerra, contra los desahucios, contra el maltrato a la mujer etc.….Pues yo no; yo estoy a favor de la justicia a favor de la paz a favor de vivienda digna  y dignidad de la mujer, a favor de la honestidad. Es un matiz que para nada es desdeñable. Si te das cuenta ponemos mucho énfasis en estar en contra de y no tanto en estar a favor de…
Un ejemplo: Imbécil, deja ya de morderte los huevos, y seguir enfadado con el compañero cabrón del trabajo, ya hasta te quita el sueño y  a lo mejor el esta tan tranquilo y ni siquiera le llega tu ira.
Piensa un poco en la posibilidad de darle libertad a ese cabrón y que sea como él quiera, y pasa a estar en posición de a favor de….ya es hora de que cojas a tu mujer y te des un buen revolcón con ella ya que últimamente a la pobre la tienes un poco abandonada. ¡Ah, si cierto!, me dices….
Normal que te pase por enfrascarte tanto en lo que no te sirve.
O tú tía, que me contaste: sabes esa, el otro día me miraba por encima del hombre, me quería hace ver que era más que yo ¡que se piensa esa! Te tiene cogida, date cuenta te está haciendo un favor si sabes mirar veras que en el fondo, te esta echando sus malas babas porque ella con su marido ya no lo hace y te tiene envidia porque  da por hecho  que tú con el tuyo sí.
Pones más énfasis en el enfado que en lo que posees y lo que te aporta, puedes ver que si sigues por ahí  puedes perder, pasa de ella y céntrate en lo tuyo.
En esta encrucijada de tiempos que estamos viviendo actualmente, la crisis económica le dicen, no es la crisis económica sino es la  crisis total de un sistema que hace aguas por todos los lados, la crisis de un sistema , que se está ahogando en sus babas de codicia, vanidad , corrupción, intransigencia, manipulación y mentiras, vacío de valores humanos que son los únicos valores, nuestra generación, y en particular nosotros quint@ del 63 de Lizarra, tenemos que tomar el compromiso de enfrentarnos a ello. Y que este sea el año del comienzo de una nueva era. Todo lo conocido religiones, sistemas económicos o ideologías sobra. Ha demostrado que es destructivo, y lejos de aglutinar separa y causa sufrimiento, todo son estratagemas para asustarnos y seamos personas sumisas y manejables.
Quién es nadie para decir como tienes que ser tú, cuáles son tus inquietudes, qué derecho tiene nadie a someterte, nos están robando derechos a pasos agigantados, somos libres vamos  a defender nuestra libertad.
Nosotros que somos la generación central de la población, estamos obligados a liderar esta reconquista, para empezar tenemos que honrar cuidar, ayudar, y mimar a las generaciones mayores, ya que muchas de las ventajas y derechos, que hemos conocido se lo debemos a que ellos vivieron tiempos muy duros. Tuvieron que sufrir y trabajar duro por conseguirlos, no les regalaron nada.
Muchos de nosotr@ que somos padres de jóvenes, adolescentes, niños, según el caso de cada uno le debemos moralmente darles una buena herencia a esta generación.
Le dicen la generación de las nuevas tecnologías, bla bla bla….
Las nuevas tecnología no son sino una mera herramienta. La suerte de muchos está en nuestras manos. Si no conseguimos transmitirles valores todo habrá  terminado.
 Pero eso bien valores humanos que son los únicos valores: honestidad, honradez, justicia, libertad, tolerancia, generosidad, solidaridad, empatía, ecología etc
Alguno podrá decir  espera un poco que  a lo mejor la cosa cambia y se arregla esto. Pues no, está todo podrido y definitivamente lo conocido no nos vale, sino pongamos en una hipótesis…………



PONGÁMONOS EN UNA HIPÓTESIS

Sucedió que hubo un enorme cataclismo en el planeta, simultáneamente, se sucedieron cientos de terremotos, erupciones volcánicas, incendios e inundaciones, quedó casi destruido y arrasado en su totalidad, solamente unos pocos miles desperdigados sobrevivieron a tal catástrofe. En un lugar tres hombres sepultados en una montaña de ruinas con gran esfuerzo emergieron a la superficie, se miraron entre sí, nunca antes se habían visto, al ver el panorama desolador que tenían ante sus ojos, uno de los tres exclamó: ¡Que podemos hacer! Justo entonces vieron acercarse un anciano que portaba una túnica blanca y una larga barba blanca y caminaba con sandalias con paso lento pero firme sobre los escombros apoyado en una larga makila, llegó, les saludó y seguidamente les propuso:
Como podéis ver al igual que yo, poco hay que comentar, habrá que hacer entre todos un plan de reconstrucción, pero antes de ello será lo más adecuado que nos conozcamos un poco, antes de hacer nada. Ya se sabe.
A modo de pequeño cuestionario, cualidades, actitudes, etc. Comenzó por el más próximo, a ver tú: dime hasta que sucedió esta hecatombe a que te dedicabas?,
-Yo trabajaba de barrendero en un barrio de mi ciudad
- ¿Estabas a gusto?
-OH, sí muy a gusto-le contestó-¿Cómo no ibas a estar a gusto teniendo el oficio más alegre del mundo? Porque siempre barriendo (va riendo).
Bueno, Fuera de bromas, mejor cuéntalo tú mismo –dijo el anciano
-Pues, veras  yo en mi trabajo de barrer las calles vivía feliz, muchas veces mientras trabajaba silbaba melodías, me saludaba con mucha gente, me sentía apreciado y muy integrado con mi barrio y sus gentes, muchas veces después de la jornada laboral, llegaba a casa tan contento que mientras me duchaba, sentía unas ganas irrefrenables, de cantar canciones de Frank  Sinatra; la de Strangers in the  night, la bordaba
-OH!, muy bien muy interesante, dijo el anciano haciendo gestos ostensibles con su cabeza, y ahora me podrías decir cuál es el sueño que te gustaría realizar?. Hizo una profunda inhalación de aire y lo exhaló lentamente, y prosiguió, OH! sí, mi sueño siempre ha sido levantarme al amanecer, montarme en un caballo, recorrer una inmensa pradera hasta el anochecer, sintiendo en todo momento la frescura del aire en mi cara, bueno, creo que en realidad no es esto sino sentirme yo caballo.
Tomo la palabra el anciano: Con esto ya es suficiente, a la vista queda que nos serás imprescindible para la reconstrucción, y dio paso al que estaba en el medio: A ver tú, ¿Que nos cuentas de ti?
-Pues veréis yo, era un humilde ebanista que vivía feliz, con mi mujer y mis dos hijos, y vi como se los tragaba la riada  a los tres, pero siempre seguirán vivos en mi corazón, en cuanto a mi sueño que me sigan encargando hacer cunas para nuevos niños que vengan al mundo, y ver la sonrisa de sus padres cuando las ven acabadas.
Es más que de sobra artesano, contamos contigo, asintió el anciano con gesto de aprobación, no quedas más que tú le dijo al tercero: ¿Que nos cuentas sobre ti?
-A ver por donde empiezo ya que mi currículo es tan extenso, soy un hombre de negocios, empecé con uno pequeño, fui ampliando y ahora últimamente poseía un gran Holding de empresas, con varios miles de trabajadores a mi cargo, repartidos por los cinco continentes, unos 30.000, poseía cinco mansiones, ranchos, tenía los mejores coches y hasta mi propia compañía aeronáutica, nadaba en la abundancia, y sobre todo, tenía todo lo que yo quería.
-Perdón, interrumpió el anciano: ¿Has dicho todo lo que querías?
-Así es, poseía una enorme fortuna poder sobre la gente, me rendían pleitesía, infundía respeto, crack de las finanzas, la lista de mujeres que ha pasado por mis aposentos es interminable, y también voy a confesar un secretillo que me divertía un montón, solía hacer travesuras con los valores bursátiles, por ejemplo de repente se me ocurría que bajase el valor de las compañías de té, y miles de campesinos asiáticos, al momento bajaban un peldaño más en el escalón de la pobreza. Que poder, me sentía el rey de mambo.
-¿Y cuál es tu sueño? preguntó el anciano.
Pensaba comprar Groenlandia y hacer de ella todo un parque temático, pero con las circunstancias actuales, creo que me conformaría con montar una empresa de construcción e ingeniería para reconstruir  toda esta ruina  e ir expandiendo el negocio, y ser yo quien estuviese al mando de la reconstrucción mundial, claro me forraría y además todos sabrían que habría sido yo el artífice.
-Bueno, vale no sigas mas, de verdad no aportas nada dijo el anciano,
-¡Como que no! Le espetó al anciano, ¡vaya sabio! Les dices que valen a un modesto  barrendero que sueña con ser caballo y a un pobre y melancólico ebanista cuyo sueño es hacer cunas. Por favor, tú no eres sabio ni nada, tú no eres más que un viejo chiflado. Un emprendedor como yo, que no vale, cállate de una vez.
El anciano esperó a que dejase de hablar, guardó un momento para el silencio, para a continuación, mirándole a los ojos serenamente y extendiendo sus manos, exclamó, sabio, ¡sabio! yo en ningún momento he dicho que fuese sabio, tú has puesto esa etiqueta, ya que parece ser que tu pones etiquetas, y haces distinciones entre la gente, yo no, yo soy un simple observador de la vida un ser humano sin más. Y si recuerdas bien, no te he dicho que no tengas valía, te he dicho que no aporta nada lo que hasta ahora nos has mostrado,  que en  cualquier caso es diferente  y además te voy a hacer ver que todo esto no ha sido más que un truco, una trampa que he puesto, y de los tres solo has caído tu en ella. Solamente tú te has creído y tomado en serio lo de la reconstrucción, tú el importante, el dinámico, el imprescindible, míratelo bien. Estás anclado no te has movido de ningún sitio, estas petrificado, no has entendido hasta ahora nada de nada. Tu megalomanía y tu codicia te tienen secuestrado e inmovilizado. Que pretencioso querer construir la vida. La vida ya esta inventada y construida, solamente hay que limitarse a vivirla como hacen ellos sin pretender nada y entonces conectas con la fuerza de la vida. Ellos tienen fuerza vital porque  con sus actos no quieren dominar al otro ni ser dominados, no manipulan no son egoístas, en fin, viven y dejan vivir,    en cambio estas muerto y nadie llora por ti.
Al oír esta sentencia por parte del anciano el señor de los negocios sintió un gran escalofrió por todo el cuerpo y una angustia que le ahogaba, se sintió rígido, frío, inmóvil y dijo:
-Qué horror ¡¡Estoy muerto! ¡Estoy muerto! ¡Socorro! ¿Qué puedo hacer? Por primera vez en su vida vio un poco de luz. Ya supo que las posesiones materiales ahora no tenían ningún valor, es más le habían condenado a ese estado, ahora bien, ya sé que lo conocido no me vale, y ahora ¿qué hago? se preguntó. Sentía pánico y desesperación, agarrándose enérgicamente al anciano le suplicó, por favor, ¿que hago?, ayúdeme estoy muy asustado.
Entonces el anciano le posó la mano izquierda con calidez en el hombro y dándole una palmada en la espalda, le expuso; yo no puedo resolverte nada solo te deseo lo mejor, cada uno debe enfrentarse solo a sus miedos.
Únicamente como sugerencia se me ocurre ya que estas totalmente inmóvil aunque te lo diga metafóricamente prueba a andar y andar sin parar y sin pensar en que vendrá, camina, camina y no pienses. La vida es movimiento.
El anciano le abrazó, hicieron lo mismo los otros dos hombres. Le despidieron y juntos se fueron los tres por un lado y nuestro apesadumbrado hombre por otro lado. ¡Animo! Nos volveremos a ver.
Fue lo último que escucho de ellos y camino durante días, de vez en cuando se preguntaba, ¿para qué? Sin cuestionarse nada él seguía su marcha, un día acaecida la noche en la espesura del bosque, se guareció con ramas y helechos, y cayó rendido, pero no estaba muy preocupado. Bueno, mañana será otro día, se dijo y se quedo fulminantemente dormido. A la mañana siguiente se despertó, se puso en pie y se dispuso a buscar algo que echarse al estomago. Tuvo suerte ya que era época de moras y castañas y enseguida dió con ellas, comió y le asentó bien, sintió que nunca había comido tan a gusto. Tras este deleite, sintió sed y fue en busca de agua, sin andar apenas oyó el ruido del agua que fluía  por una regata en un vertiginoso barranco, y casi al mismo tiempo oyó unos  gritos de ¡Socorro! ¡Socorro! ¡Socorro! Corrió hacia ahí y encontró a un niño llorando impotente .Era una zona muy inclinada, se había resbalado, en la caída se tropezó con un enorme tronco de un árbol caído que estaba ahí, lo que propició que el tronco empezase a rodar y los dos cayeran  por el talud que formaba la regata quedando el niño totalmente atrapado sin ninguna posibilidad de salir de esa situación. El hombre tranquilizo al niño, ahora mismo bajo a por ti, le quitó el tronco de encima, le subió con cuidado, observó que el niño tenía el pie roto y no podría caminar y se lo echo al hombro.
-Muchas gracias señor, me ha salvado la vida.
-De nada, que menos podía hacer podría hacer por ti.
El niño le indicó el camino a donde tenía que llevarle, donde estaban los suyos.
El traumatismo le produjo fiebre y sueño al niño súbitamente, con lo cual hizo casi todo el trayecto con el niño dormido al hombro, en el silencio del bosque solamente interrumpido, ocasionalmente por el aire al agitar ligeramente las ramas y las hojas de los árboles, y eso le dio la oportunidad al hombre a decirse a sí mismo una y otra vez, ¡Que paradoja!
Una persona inmovilizada y petrificada como yo, que haya tenido que ser el que ha salvado a este niño atrapado e inmovilizado.
Es curioso, quizás quiera decir algo. Lo que sea será, ya veremos y siguió hasta que salió del bosque, bajando ya por zona de praderas y llegó a un lago muy largo. Al fondo divisó gente aceleró el paso y un rato después llegó donde estaban. Estalló un gran alborozo y alegría, porque había aparecido el niño, ya llevaban dos días de búsqueda organizados en patrullas.
El que comandaba esa patrulla dio orden de ir al poblado y mandó que comunicasen al resto de grupos que dieran la búsqueda por terminada. Llegaron al poblado.
Todos muy felices porque el niño estaba a salvo, a nuestro hombre lo recibieron con cariño y como a un héroe. Al principio cada abrazo, cada frase de agradecimiento que recibía, le producía una extraña sensación que no sabía  por dónde salir; era normal el no lo conocía, pero le empezó a gustar ese calor y comparó con el frío que sintió cuando el anciano le dijo que estaba muerto. Uno a uno todos le dieron las gracias y para celebrarlo quedaron en hacer una comida popular. Él  mientras preparaban todo quiso ir donde estaba el niño. Llegó hasta el, dormía plácidamente, se sentó junto a él y puso sus manos sobre el corazón del niño y ese calor y paz que había sentido unos momentos antes se empezaron a intensificar. Un buen rato después el niño se despertó y al verle le sonrió, el hombre le abrazó con firmeza y suavidad al mismo tiempo. Que deleite para él, una persona que no conocía los matices del tacto y la sutiliza al contacto físico, desconocedor de las caricias. Así paso un buen rato y desde dentro de su corazón le brotó un te quiero, yo también te quiero le contestó el niño.
Les fueron a buscar para comer. Todos se dispusieron formando un gran corro y en medio una gran hoguera, se sentaron sobre unos bancos de piedra y madera, así mismo las mesas estaban hechas del mismo material. Cuando todos estaban sentados a la mesa aparecieron por una esquina del poblado tres hombres, el anciano, el ebanista y el barrendero.
 Habían permanecido ocultos para darle una sorpresa, ya no le llamaremos el hombre de negocios, le llamaremos el hombre nuevo. El hombre nuevo se emocionó al verlos, se levantó como un resorte y fue hacia ellos, fundiéndose en un abrazo con cada uno de los tres. Nos volvemos a ver, que alegría, que jubilo siento de estar de nuevo con vosotros. El sentimiento era reciproco, tomo la palabra el anciano y dirigiéndose a él le soltó:
En gratitud a tu acto de salvar al niño, te estamos muy agradecidos y hoy eres nuestro invitado; si tú quieres podrás ser uno más de los nuestros, lo cual lo recibiríamos con entusiasmo.
El hombre nuevo explicó que al fin y al cabo no era para tanto lo que había hecho, salvar al niño era lo mínimo que se le podía pedir y en cambio era él el que les tenía que agradecer a todos y especialmente al niño las sensaciones y el bienestar que estaba sintiendo desde que llego al poblado. Después de  contarles a todos cuales habían sido estas, tomó la palabra el anciano, y repaso como había sido el trayecto del hombre nuevo. ¿Te acuerdas como empezó esto? Lo último que te dije fue camina sin pensar para qué y como así lo hiciste sin perseguir nada, sin desear nada te vino todo. Conectaste con la fuerza del universo, cogiste al niño que por cierto está fuerte que pesa unos cincuenta quilos y caminaste sin cesar y deprisa solamente querías salvarlo. Para ti no querías nada. Ni te dabas cuenta del esfuerzo que hacías para ti no suponía esfuerzo. La fuerza del universo te empujaba, a esa fuerza vital y a esa sensación de paz que nos has descrito la llamamos amor.
El hombre nuevo dirigiéndose a todos les dijo:
Yo antes acumulaba muchas cosas externas que me alejaban cada vez más de mí y llegué al final a sentir el vacío. Hoy he descubierto el amor y eso es la plenitud, propongo que tengamos un recuerdo para todas las víctimas del cataclismo y juntos vayamos en busca de mas supervivientes, y le ayudemos en lo que podamos. Todos asintieron y le dedicaron una larga ovación.
Pasó un tiempo en el poblado, las cosas iban bien. El ebanista trabajaba activamente en la construcción de un nuevo poblado no muy lejos de allí, el barrendero cambió de oficio y como era muy vitalista e intuitivo y viviendo en una zona montañosa en la cual había bastantes caballos se hizo un experto en el tema y claro está consiguió hacer realidad su sueño.
Reinaba la paz y la armonía, este sistema tribal sin jerarquías de uno para todos y todos para y uno, funcionaba a las mil maravillas.
Nuestro hombre nuevo todo el potencial y talento  que poseía, lo invirtió en esta nueva etapa en  beneficio de los demás.
Se enamoró de una maravillosa mujer, dos años después tuvieron una preciosa niña y como no, nuestro ebanista hizo la cuna para la niña.
El anciano, cuando nació la niña, le recordó  al hombre nuevo:
Una vez te pregunté sobre tu sueño.
-Ah sí, ya me acuerdo
-¿Cuál sería ahora tu sueño?
-En parte, ya se ha cumplido.
-¿Cómo que en parte?
-Sí, digo en parte. El barrendero ha conseguido su sueño, el ebanista con todo su cariño ha hecho la cuna de nuestra niña, y para terminar mi sueño se cumpliría si usted cumpliese el suyo, ese sería mi sueño de gratitud, que usted Señor Sabio, y sus dos discípulos cumpliesen sus sueños.
Pues verás hijo, tu sueño está cumplido, los sueños son realidad mi sueño es vivir y yo he vivido mucho, está cumplido con creces.




   Bueno estimad@ quint@, espero que pasemos un día inolvidable de quintos que este 2013 sea el año de la nueva era y deseo una larga  e intensa vida para nosotr@s. Así que ya sabes, quint@, mete la quinta y a vivir a tope.

   Quiero terminar recordando a una persona maravillosa y entrañable para mí y para todo nuestra cuadrilla, que aunque físicamente no esté entre nosotros, su espíritu siempre estará entre nosotros se trata de Martintxo Santamaría y a otra persona maravillosa y querida por nosotros que fue Eugenio San Martín, desconozco si hubiese algún ausente mas de los nuestros, en cuyo caso también se le recordaría.

   Martintxo, Eugenio, maite zaituztegu.







Xabi Erdozain Azpilkueta



 

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